jueves, 8 de marzo de 2012


PRESENTACIÓN DE LA UNIDAD CURRICULAR CASTELLANO Y LITERATURA EN LA EDUCACIÓN MEDIA TÉCNICA COMERCIO Y SERVICIOS ADMINISTRATIVOS MENCIÓN POSTAL TELEGRÁFICA

      Al incluirse la asignatura Castellano y Literatura en el currículo de la educación técnica media postal telegráfica, es posible visualizar que su carácter de materia común de nivel, insertada en los semestres del 1ro. al tercero, manifiesta dos funciones, una, ocupar su lugar de asignatura de la educación media diversificada, y la segunda, convertirse en un eje transversal destinado a complementar los objetivos de enseñanza aprendizaje en los estudios técnicos medios, conectando con ello, muchas de las asignaturas del currículo con el fin de lograr una visión de conjunto.
     La importancia de conocer, o bien hacer contacto, aunque sea de manera dosificada con algunas de las obras literarias que etapa tras etapa en el tiempo, estuvieron enmarcadas en los acontecimientos históricos mundiales, desde los orígenes del quehacer humano hasta la actualidad, radica en que se pueda manejar modestamente, sin presunciones, una cultura general: basada esta, en el conocimiento básico del mundo en qué vivimos, sus inicios culturales, sus conflictos y el transcurso de lo que actualmente experimentamos como miembros de comunidades y naciones que se interrelacionan. A través de la literatura se puede conocer al hombre y su evolución, a las sociedades y su evolución, incluyendo sus caídas y éxitos. Por otra parte, es igualmente de especial importancia el estímulo de la lectura y la redacción.
    Jamás podrá saber una persona lo que desea transmitir un texto o enunciado, sea cual sea, si no sabe leerlo de manera correcta, la única manera de “descifrarlo” es leyéndolo con la atención necesaria. Leer, es algo que puede parecer sencillo si se trata de educación de adultos, pues la enseñanza de la lectura se aprende desde la educación inicial. Sin embargo, al parecer, la práctica no es suficientemente estimulada y llega a caer en el desuso, sobre todo actualmente, cuando las tecnologías digitales ubican su punto de atracción en los efectos visuales y auditivos, suelen ahora, hablar más los gestos de los cuerpos, los dibujos, los colores, las animaciones digitales, los chistes visuales y/o sonoros, la música, los videos, los audiolibros, no así las palabras, que son nuestra forma más elemental de transmisión y comunicación. La palabra hablada, el diálogo, es la manera más inmediata de establecer una comunicación. Los discursos orales: conferencias, foros, reuniones, exposiciones, suelen ser mediatos debido a que los receptores del mensaje, por ser numerosos, pueden sufrir interferencias de cualquier índole que evitan no sólo captar toda la información, sino también, manifestar sus pensamientos acerca de lo que recibe. No obstante, algunos de estos discursos orales, son apoyados con videos o láminas que poseen textos escritos, sin embargo, quedan en segundo lugar y la mayoría de las veces son de bastante significación. Todos los adelantos tecnológicos generalmente manejados en computadoras e internet, son excelentes y necesarios. Pero, mientras existan las comunicaciones escritas, los libros y otros documentos, debe afianzarse el interés en la lectura de textos correctamente escritos, ya que estos poseen una información coherente y la capacidad de transmitirla para ser aprehendida conciente y subconcientemente en el objetivo de conocer cosas nuevas, argumentos, ficciones, poesía, y temas muy diversos que pueden ser o no del interés del lector, lo cual solo sabrá este lector una vez que lo lea. Lo importante es, que conozca y se forme una opinión sobre lo que ha leído. Internet está lleno de artículos y escritos, unos de calidad, otros de cualificación muy baja. De igual manera, una persona que no tiene obstáculos para leer un mensaje y comprenderlo, valora mucho mejor lo tecnológico audiovisual.
      La lectura de un texto, correctamente escrito, cualquier obra de literatura, noticia de prensa escrita, comunicación organizacional del tipo oficio, por ejemplo, logra, si así lo quiere el estudiante, por un lado, investigar palabras desconocidas para él, en el ejercicio de enriquecer su vocabulario y por otro, mejorar mucho su ortografía y sintaxis, también es una herramienta bastante útil para aprender a redactar de manera correcta y formarse su propio estilo.    Si alguna vez en el universo, la comunicación logra prescindir de la palabra hablada y escrita, los libros, la literatura y textos en general, dejarán de existir. Mientras, las ansias del hombre de saber y conocer, los necesitan.
     En cuanto a lo que se refiere al castellano, es el idioma de los latinoamericanos que procede de la lengua española, llamado así por la antigua región de Castilla en España para identificar dialectos españoles y la lengua de los hispanohablantes de América latina, por diferenciar, de alguna manera, ciertos giros, palabra o tonos propios de estos países. Es el deber ineludible de todos los habitantes de Latinoamérica, en este caso Venezuela, hablar con propiedad y corrección el idioma castellano, lengua perfectamente expresada en y vinculada con su literatura.